viernes, 7 de mayo de 2010

ENSAYO

LA EDUCACIÓN ARTISTICA CON NUEVOS DOCENTES
Educación Artística es una de las asignaturas que integran el programa de estudios de educación primaria y para los alumnos representa la oportunidad de desarrollar su capacidad de expresión a través de diferentes manifestaciones artísticas, como la danza, el teatro, el canto, etc. el propósito planteado es estimular la sensibilidad y percepción y sobre todo desarrollar la creatividad.
Sin embargo para pensar en cómo estudiar adecuadamente esta asignatura hay que ver como se trabaja en las escuelas primarias. Lo que vamos a encontrar es el carácter irrelevante que esta adquiere, sucede que no recibe la importancia que debiera y el mínimo acercamiento que los alumnos tienen está reflejado en sencillos dibujos elaborados por los alumnos, en donde lo que se evalúa es haberlo hecho y no el cómo lo hizo e incluso el porqué de esa representación.
¿Qué pasa como docentes? Comúnmente se ponen miles de pretextos, ya sea que no hay tiempo como no estoy preparado, considérese que trabajar educación artística no es una asignatura que requiera tener conocimientos tan especializados en la materia, me parece que sería productivo retomar momentos tan simples y materiales tan a la mano para preguntar a nuestros alumnos lo que observan, lo que aquello que ven les trasmite.
Lo que sucede es que poseemos una concepción errónea de lo que representa la asignatura, que en las escuelas primarias podemos encontrar que los alumnos están elaborando alguna manualidad con motivo de evaluar la asignatura, y sí, podemos considerar que esta actividad está desarrollando habilidades manuales en los alumnos, sin embargo no está quedando de manifiesto la creatividad, pues los alumnos no están manipulando el material para hacer sus propias creaciones.
Con lo anterior quiero comentar acerca de un error que considero existe en la educación, pues todos visualizamos un aula en la que los alumnos estén quietos y acatando las indicaciones del maestro. Sabemos que esto no es posible en su totalidad, pues el aprendizaje se da a través de la experiencia, del compartir con otros y a veces cuartamos esa libertad generando que los alumnos no se involucren como se espera en la clase, es como cuando pedimos a un niño que externe su opinión pero antes lo evidenciamos ante sus compañeros por alguna situación dada en el aula. Tampoco digo que dejemos a los alumnos tomar la clase a su manera, el maestro es el punto esencial, es el que dirige y el que, en el caso de la asignatura en cuestión, marcará la pauta para que los alumnos sientan la confianza de participar de una u otra manera.
Pues la escuela es el espacio donde se entra en contacto con diferentes saberes, los cuales se trasmiten al entorno a través de los alumnos. Ya vimos cual es la situación de la asignatura en la escuela primaria, pero ¿qué representa para los maestros en formación? De entrada creo que implica un reto y una gran responsabilidad, puesto hay que tratar de cambiar la concepción que se tiene, proponiendo actividades que estén en concordancia con el resto las materias que integran el programa y sobre todo que respondan a los intereses de los alumnos. También entra el enfrentar las ideas que las personas puedan tener acerca de quién puede o no participar en determinada actividad, esto sería un poco más difícil puesto que hay que adentrase en la idiosincrasia de las personas.
De manera general esta asignatura me parece un elemento importante en la formación de los alumnos y por consecuencia un elemento que debería considerarse indispensable por la trascendencia escolar y social que puede acarrear para los alumnos, claro que esto se logra con una enseñanza adecuada, que es la parte que corresponde a los nuevos docentes.

Zaira Guadalupe Quintero Medellín

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